Sea como sea, con plumas o pelos, pequeño o monstruosamente grande, el animal suele ser un buen compañero de los niños en los libros infantiles. Sin embargo, la protagonista de esta historia no opina lo mismo. Este nuevo álbum de Blexbolex ?un trabajo minucioso de cuatro años? cuenta las vacaciones de una niña pequeña en casa de su abuelo, a donde llega en tren un elefante. Una serie de acontecimientos, entre los cuales también hay desavenencias y rivalidades, van formando la historia, o las historias, de acuerdo con la observación y la imaginación del lector. Un libro sin palabras, cuya narración se basa totalmente en la sucesión de imágenes, organizadas en doble página y con pequeñas viñetas, que hacen avanzar al público en la trama y, en algunos casos, le sugieren atajos, saltos o lo envuelve en el pensamiento o los sueños de la protagonista.Blexbolex (Bernard Granger) nació en Douai en 1966. Sse graduó en la Escuela de Bellas Artes de Angoulême (1984) con la intención de convertirse en pintor; allí descubrió su pasión por la serigrafía. Comenzó autopublicando su trabajo para después a colaborar en publicaciones como Popo Color, Fusée o Ferraille. Sus ilustraciones, inspiradas en el diseño vintage, la novela negra o las películas de Jacques Tati, mezclan antiguos métodos de impresión con nuevas interpretaciones y técnicas. Entre otros, recibió el Premio al Mejor Diseño de Libros del Mundo en la Feria del Libro de Leipzig de 2008.-Igual que Romance (LZR, 2013), este es un álbum de indiscutible magnetismo, con ilustraciones de grano grueso y ennegrecido, que recuerda las impresiones de antaño. -Un libro que puede leerse y releerse con tanta facilidad que hasta los adultos podrán hacerlo. -Trata de forma ingeniosa y sutil el tema de los celos y la rivalidad entre hermanos o amigos, invitando al lector a formarse su propia opinión sobre el drama en miniatura que se plantea. -El uso atrevido del color, que mezcla tonos neutros con otros muy vivos, despiertan en el lector una mezcla de sorpresa y nostalgia.