Contrariamente a la creencia tradicional, la muerte no es un momento en el tiempo, sino un proceso. Un proceso que puede ser interrumpido incluso bastante después de que haya comenzado. Muchas técnicas innovadoras, como la drástica reducción de la temperatura corporal del paciente, han demostrado su eficacia para revivir tanto el cuerpo como la mente, pero los estudios muestran que solo son empleadas en aproximadamente la mitad de los hospitales de Estados Unidos y Europa.En Resurrecciones, el doctor Sam Parnia presenta investigaciones de vanguardia que han permitido a los médicos revertir la muerte, así como arrojar luz al último de los misterios: qué sucede con la consciencia humana durante y después de este proceso. Con trabajos como el suyo nos acercamos cada vez más a una nueva ciencia que nos mostrará la verdadera naturaleza de la mente y un futuro en el que la muerte no es el final.